El manguito de los rotadores es un grupo de cuatro músculos que rodean la articulación del hombro, ubicados en la parte superior del hueso del brazo (húmero). Juega un papel crucial en la estabilización de la articulación del hombro y permite el movimiento del mismo.
Los desgarros del manguito de los rotadores pueden resultar de lesiones agudas, como caídas, o de causas crónicas debido a la degeneración. Comúnmente se asocia con tendinosis debajo del acromion (parte frontal de la escápula) después de los 40 años. Los síntomas incluyen dolor en el hombro y el brazo, especialmente durante los movimientos por encima de la cabeza, aumento del dolor al acostarse sobre el lado afectado y reducción de la fuerza y movilidad del brazo.
Una historia médica detallada y pruebas especiales se utilizan para diagnosticar un desgarro del manguito de los rotadores. Se utilizan radiografías, ultrasonido médico e imágenes de resonancia magnética para confirmar el diagnóstico y comprender el alcance del desgarro y cualquier condición acompañante.
Los métodos no quirúrgicos pueden ser suficientes para aproximadamente el 50% de los pacientes, que incluyen reposo, evadir actividades dolorosas, medicación, ejercicios físicos e inyecciones de esteroides. Se considera el tratamiento quirúrgico cuando los métodos no quirúrgicos no proporcionan alivio o restauran la funcionalidad. El tratamiento quirúrgico se recomienda para casos en los que los síntomas persisten durante 6-12 meses, pérdida de fuerza y función del hombro o un desgarro mayor a 3 cm.
Un hombro dislocado ocurre cuando el húmero (bola) se separa de la escápula (socket) en la articulación del hombro, que tiene un alto rango de movimiento y es propenso a la dislocación. Los síntomas incluyen dolor al levantar el hombro, fricción durante los movimientos del hombro, deformación visible del hombro, debilidad o miedo a la dislocación.
La historia médica, el examen físico y las técnicas radiográficas se utilizan para diagnosticar un hombro dislocado. El tratamiento inicial implica inmovilizar la articulación en una posición adecuada y aplicar compresas de hielo para reducir la hinchazón y aliviar el dolor. Las dislocaciones recurrentes pueden requerir un tratamiento quirúrgico mediante métodos artroscópicos para reparar las lágrimas en las estructuras articulares.
La artroscopía del hombro es un procedimiento mínimamente invasivo que se utiliza para diagnosticar y tratar varias condiciones del hombro, incluyendo dislocaciones recurrentes del hombro, lesiones de los tendones, síndrome de pinzamiento, artritis, desgarros musculares, lesiones del cartílago y más. Comparada con la cirugía abierta, la artroscopía ofrece ventajas como incisiones más pequeñas, un menor riesgo de infección, estancias hospitalarias más cortas, una recuperación más rápida y una mejor exploración intra-articular.
El reemplazo total de hombro es un procedimiento quirúrgico utilizado para abordar el daño del cartílago en la articulación del hombro. El cartílago articular dañado se reemplaza con una superficie móvil artificial. Inicialmente se exploran opciones de tratamiento como analgésicos y terapia física. La intervención quirúrgica se vuelve necesaria cuando el alivio del dolor es insuficiente. El objetivo principal del reemplazo de hombro es restaurar la funcionalidad y reducir el dolor. Un nuevo procedimiento llamado "prótesis inversa" se utiliza en casos avanzados con desgarros graves del manguito de los rotadores y desgaste del cartílago articular, particularmente en pacientes mayores, para mejorar significativamente la funcionalidad del hombro.
Todos los procedimientos incluyen: Tratamiento, medicación postoperatoria, consulta pre y post, pruebas y análisis.
El costo de las operaciones puede variar dependiendo del tipo de procedimiento realizado y cualquier tratamiento adicional que pueda agregarse.
Los precios están aumentando constantemente, pero no te preocupes, haz un depósito de $100 ahora mismo y haz tu reserva.